a) lubricar la goma adecuadamente; b) no alterar su constitución; c) que sea de fácil lavado.

- El Aceite de Ricino es buen lubricante pero de difícil limpieza.
- El jabón neutro con glicerina en cambio reúne las tres condiciones. Ambos ingredientes se compran en Droguerías Industriales. Se mezclan al 50% calentando a baño María hasta obtener un liquido espeso. Se continúa revolviendo hasta que la mezcla se enfríe.
- El aceite Rojo Turco con Glicerina reúne también las 3 condiciones. El primer ingrediente se compra también en Droguería Industrial. Se mezclan a temperatura normal y en la proporción deseada de acuerdo a la fluidez que se quiera.

2.7.1.10. Ducto protector de fuselaje

Todo "gomero" veterano conoce bien los inconvenientes que aparejan los motores a goma.

Por un lado, cuando la descarga tiene lugar, una lluvia de minúsculas gotitas de lubricante se proyectan sobre la superficie interna del fuselaje ensuciando el entelado y la estructura. El primero se afloja, y el segundo se ablanda haciéndolo más pasible de rotura.

El modelo va aumentando de peso y sus performance de vuelo decaen, jornada tras jornada.

Por otro lado, el temido estallido de la madeja es una "espada de Damocles" cada vez que el aeromodelista se dispone a remontarla a fondo.

En el mejor e los casos una reventada implicará una reparación total del entelado del fuselaje. En cacahuetes más delicados el desastre puede alcanzar a la estructura, estropeando definitivamente muchas horas de paciente trabajo.

Estos "flagelos" crearon en mí una verdadera obsesión, y decidí buscar una solución. Y fue muy simple : Un tubo de nylon o celofán envolviendo holgadamente la banda de goma, de una longitud aproximadamente igual a la distancia entre gancho y un diámetro de unos 10 a 12 mm, recogerá dentro de sí toda salpicadura de lubricante, restituyéndola nuevamente a la madeja en su permanente rozamiento con ella, fig. 44.

fig. 44 - Morane Saulnier Parasol "L"

Ya no habrá más peligro de estallidos. Cuando ello ocurra, la goma quedará retenida en el tubo protector, y bastará deslizar con cuidado el pasador trasero para que el ducto sea fácilmente extraído por la nariz con la goma retorcida en su interior.

Para la extracción del pasador de cola que se encontrará fuertemente

Ulises Alvarez